Los principios básicos de tomar hierbas

El consumo de diversas hierbas, ya sea con fines terapéuticos o preventivos, siempre debe realizarse de manera adecuada y con moderación. El análisis de la dosis correcta para niños, adultos y mujeres embarazadas seguirá en un artículo sobre el uso adecuado de las hierbas. Pero el consumo adecuado no se limita a eso. Hay algunos principios básicos que deben seguirse para no provocar sobredosis y especialmente complicaciones.

Las dos reglas básicas para tomar hierbas son:

Descanso semanal: para el buen funcionamiento de una hierba, debe haber un descanso de su uso, 1 día a la semana. Después de 2 a 3 semanas de tratamiento, las hierbas no deben consumirse durante 3 días consecutivos. Durante este período de pausa, podemos monitorear cualquier cambio o influencia en el resultado deseado, e incluso los posibles efectos secundarios. Si los resultados dentro de los tres días de descanso no son satisfactorios o permanecen en el mismo nivel, continúe con la misma dosis de hierbas durante otras 3 semanas. Si hay una mejora en alguna condición, continúe con una dosis reducida de hierba. Si se logra el efecto deseado, se puede detener el tratamiento y se puede comenzar con algún otro uso nutricional o terapéutico de las hierbas, según sus necesidades.

Ajuste de la dosis: La dosis no es algo que dependa solo de su peso, hay muchos factores que afectan la cantidad final de hierba que usamos. Los más importantes de estos factores se enumeran a continuación.

• Para un efecto general lento y gradual, las hierbas deben consumirse en pequeñas cantidades mezcladas con leche entre comidas, ya que esto retrasa la absorción.

• Para aumentar el apetito y aumentar las secreciones digestivas o para una acción local en el tracto gastrointestinal, el consumo de hierbas debe realizarse antes de la comida.

• Para aumentar la absorción de una hierba y su efecto inmediato, es preferible consumir de 1 a 2 horas después de una comida.

Hierbas que no tienen un sabor tolerable, es mejor consumirlas como decocciones frías o infusiones.

Fuente: Botanologio.com